La Enfermedad de Alzheimer es neurodegenerativa e irreversible, es decir, empeora progresivamente con el tiempo y no tiene cura. La esperanza de vida se ha calculado entre los 10- 12 años a partir del momento en que se realiza el diagnóstico, pero puede variar dependiendo de diversos factores, algunos de los cuales son ambientales tales como los años de escolaridad, la calidad de alimentación y estilo de vida que tuvo la persona (actividad física, no fumar, etc.). Algunos pacientes viven entre 3-5 años luego de la aparición de los primeros síntomas, mientras otros sobreviven más de 20 años.

La causa de muerte más frecuente son las infecciones asociadas a alteración de la deglución, o de infecciones relacionadas a incontinencia urinaria. La Enfermedad de Alzheimer se puede dividir en 3 etapas clínicas:

Etapa 1. Duración 1- 3 años. Aparece pérdida de memoria y problemas para realizar nuevos aprendizajes. Puede haber compromiso de la capacidad de organización visoespacial. Problemas para encontrar la palabra o el nombre correcto. Aparece gradualmente mayor dificultad para pensar con claridad, tomar decisiones y planificar actividades que antes hacía con frecuencia y con facilidad. Pueden aparecer síntomas leves de depresión o ansiedad.

Etapa 2. Duración 2- 10 años. Se observa una alteración severa de la memoria reciente y remota, con olvidos más evidentes de eventos e información de la historia personal como la dirección, el número de teléfono propio, y en qué colegio estudió, por ejemplo. Desorientación de espacio y tiempo (lugar y fecha actual). En el lenguaje aparece afasia fluida (dificultad para comunicarse a través del lenguaje oral). Surge dificultad para realizar cálculos. Se observan cambios en la personalidad y conductas: agitación, recelo, delirio de robo. En el sistema motor aparece vagabundeo.

Etapa 3. El paciente presenta un compromiso severo de las funciones intelectuales y alta dependencia al entorno, necesitando cuidado y supervisión constante de otras personas. El paciente no es capaz de reconocer su imagen en el espejo ni a sus familiares, y presenta dificultades severas para comunicarse. En el sistema motor destaca rigidez de las extremidades y postura en flexión. Hay dificultad en la deglución y frecuentes aspiraciones. Incontinencia urinaria y fecal.